Hoy 8 de noviembre al finalizar un ciclo más al interior del TALLER DE EXPRESIÓN de Diseño Gráfico en la IED Tecnológico de Madrid son muchas las cosas que se comienzan a valorar con suma atención:
1. La calidez y la calidad humana; actitud por demás subvalorada en nuestros días donde lo importante es el afán de tener y mucho más de parecer, por ello rescato la principal característica no solo de nuestra comunidad, mucho más de nuestro grupo de jóvenes y señoritas que todos los días, a pesar de lo que cotidianamente puedan vivir, nos regalan una sonrisa, nos sacan una carcajada, nos llenan de alegría el aula y las ganas de estar en ella.
2. Las oportunidades para celebrar; sí, efectivamente para nosotros todos los días son dignos para hacer una fiesta, compartir un ponqué o simplemente contar una historia, la base de nuestro trabajo en el aula son las emociones humanas ya que la creación se nutre de ellas, por tanto, es importante para nosotros el estado del alma o del espíritu, en el taller de expresión todas las emociones son bienvenidas.
3. Las posibilidades de CREAR y reinterpretar la propia realidad; lo aprendido vuelve a la mano una y otra vez, lo que se trae y lo que se lleva a la memoria que pronto terminara de nuevo en el papel y se convertirá en el gesto creador, eso que llaman dibujo en el mundo ordinario y que nuestros diseñadores tendrán que convertir en oportunidades para presentarse ante el mundo.
4. Las prácticas de color; que se planearon este año en compañía de la compañera Laura Osorio, colega que ha tenido a bien compartir su juventud, su saber y sobre todo su exigencia y alegría.
Y POR SOBRE TODO EL GRAN TALENTO QUE ACOMPAÑA A NUESTROS JÓVENES Y SEÑORITAS DE LA ESPECIALIDAD
Dedicado con especial cariño a la memoria de nuestra inolvidable LAURA VALENTINA BERNAL ÑANEZ a quien llevaremos siempre en nuestra memoria
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